“Una vez más queda al descubierto la actitud inescrupulosa de personas y medios que intentan desacreditar nuestra sociedad con falsedades”, así dice la nota informativa del Gobierno de La Habana.
Nadie lo dude: como describen los hechos en los medios enemigos y algunos personeros de la irritación, los mismos que potencian el descrédito, es como nos quieren ver “con la cabeza donde llevamos los pies”.
Se la pasan calentando nuestros escenarios, sobredimensionando hechos, convirtiéndolos en trascendentales, tratando de mostrar un país inseguro en el que las autoridades del orden están incapacitadas para ejercerlo, y las organizaciones sociales y políticas van dejando a su paso una estela de errores.
Apuestan porque la juventud esté enconada, enfrentada entre barrios, viviendo en escenarios de descontrol e ingobernabilidad, donde haya decenas de muertos en las calles y cientos de heridos. Que las pandillas tomen el control de los espacios públicos y de recreación, que cobren tributos a los negocios privados (MIPYMES) para poder vender, que hayan impuestos por gozar de seguridad, floreciendo “las agencias de guardias de seguridad”… y por supuesto, las drogas sean el combustible que mueva la voluntad de la poderosa maquinaria del crimen.https://www.youtube.com/embed/hEiEO-DVpyI
Sueñan con que los cubanos mueran jóvenes, la corrupción atraviese cada espacio del sistema de gobierno y las familias sientan terror por el niño que sale de la escuela y enfrenta las calles en la cotidianidad, es el propósito. Tenemos la sufrida patria de Haití como ejemplo o campo de ensayos.
No es que queramos tapar el sol con un dedo, en todas las sociedades hay hechos significativos de violencia que se agravan con las crisis económicas. Pero en este caso se les va la mano a los “notidigitales”.
Para los que “la inventaron en el aire”, pena les debe dar cuando el mundo sabe que faltan días para el inicio de la campaña del verano y que la UJC, nada tiene que ver con este fatídico suceso.
Alma Cubanita 